Hoy queremos hablaros sobre la punción seca, una técnica fisioterápica semi-invasiva que se emplea para tratar los puntos gatillo y que nuestros expertos llevan a cabo asiduamente en nuestra clínica de fisioterapia en Valencia.
Por si nunca habías oído hablar de ellos, llamamos puntos gatillo a aquellas zonas del músculo que se encuentran retraídas y generan dolor a distancia, tanto ante la compresión directa como ante el estiramiento y/o contracción del músculo.
Los motivos por los cuales se puede generar este dolor miofascial son diversos, desde una inflamación hasta una lesión deportiva, pasando por dolor referido, entre otros.
Para tratar esta dolencia, puncionaremos la zona en cuestión y desencadenaremos una serie de contracciones para inhibir el músculo y relajarlo. Combinaremos esto con el uso del pointer, una herramienta que facilitará ese proceso de vasodilatación y relajación muscular.
A continuación, lo explicaremos más detalladamente.
¿Cómo se realiza la punción seca?
La técnica comienza con la inserción de una aguja a través de la piel en la banda tensa del músculo sin inyectar ninguna clase de medicamento o sustancia, motivo por el cual recibe el nombre de punción seca. Una vez introducida, utilizaremos el estímulo mecánico de la aguja para generar la respuesta muscular que buscamos. También podremos añadir un estímulo eléctrico, que se producirá cuando el pointer entre en contacto con la aguja.
Esta estimulación evitará que se continúe liberando acetilcolina, el neurotransmisor que perpetúa la contracción del músculo. Por tanto, con esta técnica lograremos disminuir el dolor y mejorar los procesos inflamatorios en la zona.
Tipos de punción seca
En el centro trataremos a aquellos/as pacientes que presenten puntos gatillo miofasciales mediante:
- Punción seca superficial. Buscaremos que la aguja actúe en el tejido celular subcutáneo y, por tanto, no la introduciremos más de un centímetro.
- Punción seca profunda. En este caso, introduciremos la aguja a un nivel más profundo, hasta llegar al punto gatillo e incluso atravesando el mismo.
Además, dentro de estas dos categorías encontramos diferentes técnicas, algunas de las cuales son las siguientes:
Técnicas de punción seca superficial
- Técnica de PSS de Baldry. Consiste en introducir la aguja en los tejidos subcutáneos suprayacentes al punto gatillo durante un corto periodo de tiempo y después retirarla. De esta forma, disminuye el dolor de la zona y desaparece cualquier banda tensa existente antes del tratamiento.
- Técnica de punción seca subcutánea de Fu. También llamada técnica de acupuntura flotante, esta técnica requiere el uso de unas agujas especiales, de 1 mm de diámetro y una longitud de 31 mm. Generalmente, introduciremos la aguja a unos 7 u 8 centímetros del punto gatillo y después la manipularemos desplazando el mango a un lado y a otro en paralelo a la piel del paciente.
Técnicas de punción seca profunda
- Técnica de PSP de entrada y salida rápidas de Hong. Se trata de la inserción y extracción de la aguja de forma rápida en el punto gatillo miofascial de tal forma que se produzca una Respuesta de Espasmo Local (REL), es decir, una contracción involuntaria del músculo. Repetiremos la maniobra hasta que desaparezca dicha contracción.
- Técnica de estimulación intramuscular de Gunn. Esta técnica está principalmente enfocada al tratamiento del dolor crónico y consiste en la punción de los músculos paravertebrales profundos y músculos periféricos en los que se puede evidenciar acortamiento. Las agujas se insertan y se manipulan mediante un inyector, realizando entradas y salidas rápidas y giros bidireccionales.
Estas son algunas de las técnicas de punción seca que nuestros profesionales han aprendido a lo largo de años de estudio y puesta en práctica. Si quieres saber cuándo es recomendable que tratemos tu dolencia mediante la técnica de punción seca, ¡sigue leyendo!
¿Para qué patologías está indicada la punción seca?
Como ya hemos comentado, esta técnica está enfocada a tratar el Síndrome de Dolor Miofascial (SDM) provocado por los puntos gatillo, que generalmente aparecen después de que un músculo se haya contraído reiteradamente. Las causas pueden ser diversas: movimientos repetitivos en el trabajo o a raíz de algún deporte, tensión muscular relativa al estrés…
Estos puntos gatillo están presentes diversas patologías, como tendinopatías del manguito rotador en los hombros, síndrome del piramidal, cervicalgias mecánicas con sobrecarga de la musculatura de los trapecios, los escalenos o los esternocleidomastoideos, epicondilalgias o epicondilitis… Y otras muchas.
Así pues, si crees que puedes estar padeciendo Síndrome de Dolor Miofascial, en el Centre de Fisioteràpia Borja Ortega estaremos encantados de ayudarte.
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Muy interesante!!! Se entiende todo a la perfección, gracias!